Oslo, ubicada en la costa sur del país, la capital de Noruega, es una pequeña ciudad que ha sabido crecer sin perder sus señas de identidad, llegando a convertirse en una de las capitales más bellas de Europa. El centro de Oslo es un crisol de cultura y actividad, con una variedad de museos, galerías de arte, tiendas, restaurantes y cafés. Además de sus atracciones culturales y naturales, Oslo también ofrece una amplia gama de actividades al aire libre, como senderismo en el bosque de Nordmarka, navegación en el fiordo de Oslo y esquí en invierno en las pistas cercanas.